Mi inclinación hacia el arte arranca en la niñez y empieza en el dibujo. Cuándo descubrí la escultura me fascinó por su dificultad, ya que esta requería ser capaz de ver el objeto en tres dimensiones.
Desde que empezé mi trayectoria como profesional por el año 1999, el material que utilizo es la piedra.
La piedra es el material más difícil, por su dureza y esa dificultad añadida de que todo tiene que salir perfecto a la primera. La piedra no permite rectificaciones, pero también tiene ventajas como su belleza, que va aumentando con el tiempo y su duración que la hace casi eterna.
Desde mi comienzo profesional tengo una obsesión y principio al que he sido fiel, el crear piezas únicas y originales, que tallo directamente sobre la piedra.
En mi taller trabajo única y exclusivamente por encargo, intentado llevar a la piedra los proyectos e ideas del cliente. Por eso, quién compra una de mis esculturas tiene la certeza de que no encontrará otra igual, que está hecha con la mayor dedicación y los mejores materiales y que es una obra de arte que se revalorizará con el tiempo.
Llevaremos su escultura de piedra debidamente protegida a cualquier lugar del mundo. Pídanos presupuesto y consúltenos cualquier duda.