Esta escultura representa a una mujer donante de órganos que muestra con cariño una cicatriz en la zona dorsal, contenta por haber salvado una vida gracias a la donación de un riñón.
Idea original mía, realizada en respuesta a la solicitud de la Asociación de Donantes y Receptores de Órganos de Vigo (ADROVI), que propuso al Concello de Pontevedra la creación de una escultura en agradecimiento a aquellas personas que deciden prolongar su vida y/o la de otras personas a través de la donación. Un monumento al Donante de Órganos.
La escultura, colocada ante el tejo que está en el exterior del Hospital Provincial de la ciudad de Pontevedra, es una talla de 1.70×o.55×o60m.en granito silvestre de Lugo y ejecutado a talla directa.


